Empaques más pequeños y estratégicos
Recordando la situación actual de nuestro país no solamente
observamos las noticias de conocimiento común ciudadano en cuanto a la
delincuencia; la política diversa; la inflación; la ausencia de control de
precios; etc.
En este momento observemos nuestro recorrido mental en un
supermercado de la ciudad de Guayaquil; de Quito o de Cuenca donde mi experiencia
ha sido comparar los productos que se exhiben en las perchas versus los
productos que se muestran en las repisas de las despensas en las diferentes
localidades como barrios o ciudadelas.
Es cuando usted como consumidor habitual podrá identificar la
diferencia en el tamaño de los empaques que puede encontrar de una misma marca
y de un mismo producto que en su mayoría son artículos de consumo masivo y
recuerde el pequeño tamaño que se ofrecen en las tiendas frente al gran tamaño
o mediano porte que se expenden en las perchas de los supermercados.
Obviamente podemos descifrar que los empaques o fundas son más
pequeños en una tienda de barrio ya sea porque el productor considera que
nosotros acudimos a una tienda cercana al hogar por una compra inesperada o rápida
y que cuando nos presentamos en un supermercado pensamos en abastecer la alacena
por más tiempo o porque nuestro grupo familiar es más amplio y por eso acudimos
al supermercado, inclusive en el supermercado con un carro más grande para
llevar las compras.
Nótese también que estos carros de transporte de los
productos en los supermercados ahora son de mayor tamaño. Interesante.
Pero el punto que nos queremos centrar en este artículo se
dirige hacia el tamaño del empaque que está llegando a ofrecerse muy
discretamente como introducción en las perchas de los supermercados, ahora también
al igual que las despensas usted tendrá la oferta de productos en presentaciones
más pequeñas y puede darse el caso porque:
Son portables para un viaje
Son más cómodos para llevar en las fundas cada vez más
pequeñas de los supermercados
Por la situación económica, el consumo obviamente ese
restringido en ciertas épocas
Las empresas productoras no quieren perder a sus clientes y
con tal que pueda seguir consumiendo esta marca y ser fiel él y su descendencia
ofrecen un producto de precio accesible sin afectar la calidad.
Inclusive, en la alacena en nuestro, algunos productos están venciendo,
debido al clima y al consumismo de comida en locales comerciales.
Ya una funda de harina que usted compraba grande para
elaborar en el hogar una torta o empanadas o diversos otros usos, ya no se
consume en el hogar como antes y queda un remanente de este producto, porque
las tortas ya vienen listas en polvo en la caja o porque las empanadas también
ya están listas preparadas y empacadas al vacío y congeladas.
Solamente el cliente con cultura tradicional es quien puede
darle el diverso uso a esta funda de harina y así otros productos que usted
puede a partir de hoy comenzar a mirar como: Lavaplatos en envases mucho más
pequeños; jabones diminutos; fundas de fideos más pequeñas; frascos de champú
de menor tamaño; paquetes de pañales con menos unidades; empaques de galletas
con menos unidades; fundas de leche en polvo portables hasta en una cartera; cereales;
mermeladas; compotas; manjares; leches
condensadas.
Un punto estratégico de los envases más pequeños es que eleva
su frecuencia de compra e inyecta una costumbre de compra continua en la
población e intrínsecamente la fidelidad perpetua.
En todo caso, las marcas de productos alimenticios se están
adaptando a la disminución de su capacidad de compra como una de las tantas
consecuencias de la problemática económica de nuestro país.
Comentarios
Publicar un comentario